DESPUES DEL TERREMOTO

Sería difícil trasmitir en estas líneas, lo que nos provoca la delicada realidad que vive nuestro país en estos días tras el terremoto que nos despertó abruptamente la madrugada del sábado.

Para los que somos creyentes, nos ha tocado dar gracias por estar bien, en nuestras casas, con nuestras familias…Y solo nos pudimos dar cuenta de la enorme batahola horas después del terremoto al ver desgarradoras imágenes de lo que está viviendo la gente en el sur, conocidos o amigos que andaban de vacaciones y de los que nada se sabe aún…

El día Lunes nos encontramos en la oficina, que a simple vista parecía haber sufrido bastante daño, nos saludamos con un abrazo bastante distinto al de otras veces o al que nunca antes existió, contentos de vernos….En ese minuto faltaba alguien del equipo y nos preocupamos de que no estuviera presente ya que ese día debía estar de vuelta de sus vacaciones…Hoy llegó a la oficina y tanto él como su familia que andaba vacacionando en el Sur se encuentran bien.

Luego comenzamos a llamar a nuestros clientes; ya no para tratar temas de contrato, sino para saber de ellos desde el lado humano, saber de ellos, de sus familias. Gracias Dios, salvo contados casos todos se encuentran bien, sin daño estructural que lamentar y vivieron el terremoto con susto más que nada.

Ya sea por el susto, o por pequeñas cositas que habrá que ir reacomodando de poquito en poquito, la oficina hoy comienza a funcionar casi de forma normal, aun se mantiene el susto, pero al obtener nueva información de los hechos a medida avanza el día, nos recuerda que somos afortunados y estamos contentos que en general para quienes conocemos, amigos, compañeros y clientes no haya novedades que lamentar….

Ahora simplemente toca ser solidarios y de ese modo agradecer nuestra suerte...